Ángel Lara Vargas, escultor costarricense, estudió en el Conservatorio de Castella, así como Artes Plásticas con énfasis en escultura en la Universidad de Costa Rica. Desde temprana edad estuvo expuesto a este arte, ya que se crió en el taller de escultura de su padre, quien lleva su mismo nombre.

En los últimos años, su trabajo como escultor se ha apartado de lo académico tradicional que son sus raíces, como tallista en piedra.  Recientemente se ha dirigido a la producción de objetos escultóricos descontextualizados, que a su vez pueden ser funcionales. 

Hoy en día, hay obras suyas por todo el globo. Su torso más grande mide 4.5 metros y está en Corea del Sur. También hay piezas en Australia, Alemania, Rusia y Estados Unidos.